Cuando miro atrás, mi viaje con el movimiento comenzó cuando experimenté unas pocas sesiones de expresión corporal en la guardería. Ahí descubrí la alegría por el movimiento.. Aunque esas sesiones desaparecieron cuando cambié de guardería, mi pasión por la educación física floreció sigilosamente durante toda la escuela, pues mi cuerpo la disfrutaba y saboreaba sin ningún esfuerzo.

Fueron muchos años después cuando descubrí hasta qué punto mi cuerpo amaba la danza , concretamente en Alemania sobre el año 2001, mientras bailaba individualmente en fiestas y, al poco tiempo, con amigos latinoamericanos al ritmo de música latina. Al mudarme a Bruselas en 2006, la salsa se convirtió en mi nueva pasión. Así dio comienzo mi exploración de varios estilos de danza , como la salsa la bachata, el merengue, la samba de gafieira, la samba no pé, el lindy hop, la danza africana, la danza oriental, el blues, el fusion, el west coast swing, el forró... – generalmente, con un enfoque de aprender bailando directamente en la pista de baile.

Mi conexión con la danza se intensificó inmensamente en 2015, cuando descubrí el zouk brasileño a través de la fascinante visión de Xandy Liberato. se sentía tan alineada con mi conexión con la danza que, a partir de ese momento, me sumergí de pleno con todo mi corazón. Así, empecé mi formación con Xandy Liberato en clases semanales, talleres internacionales, retiros y clases particulares, con el foco puesto en zouk y conexión con el método que Xandy llevaba desarrollando desde 2009. De 2018 a 2023, colaboré estrechamente con él, en un trabajo meticuloso de recopilación de información, comprensión, estructuración y sistematización del Método Liberato , así como de su sistema educativo, con el objetivo de formar a futuros facilitadores. Esta colaboración también incluyó la redacción de un manual de enseñanza del Método Liberato, así como la cocreación del diseño pedagógico de programas de formación para retiros, talleres y cursos tanto online como presenciales.

Con más de 20 años de experiencia como danzarina e investigadora experimental y teórica del Método Liberato, he sido testigo directo del potencial transformador de la danza. Sé profundamente que el movimiento consciente y la danza pueden mejorar profundamente la conexión con nuestro cuerpo, con nosotr@s mism@s y con l@s demás.